Recuerdo que a mi hermana menor, se le prometió que cada vez que se sacara un siete en el colegio, se le premiaría dándole $1000. Ella estaba muy contenta y esto condicionó su conducta, era un refuerzo positivo el regalarle esa suma de dinero a cambio de una buena nota. Por el contrario, cada vez que no obtuviera la nota máxima, los mil pesos no se le darían, lo que vendría siendo un refuerzo negativo, ya que se le priva de algo.
Esto es un tipo de condicionamiento operante. Este tipo de aprendizaje lo revisamos en la asignatura de psicología general y sirve para lograr una conducta esperada en una persona, como se puede hacer con los animales.
Como refuerzo también se le aplicaba el permiso para salir a la calle a jugar con sus amigas o la privación de esto. Yo no comparto mucho la teoría del conductismo, pero en este caso sirvió de sobremanera, ya que mi hermana, que actualmente cursa 5° básico, ha obtenido durante varios años un buen lugar en su curso, sin salir de los tres primeros. Los colegios acá en Chile enfatizan en la competencia y se inculca a la persona el competir, por lo que se puede volver egoísta, sin embargo mi hermana le ayuda a estudiar a sus compañeras y hace ayudantías, ya que los valores que en la institución familiar se le han infundido han sido los de no ser egoístas, contrariamente a los impartidos por la institución de la educación ejercida por los colegios.
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