Primera entrada

Luego del terremoto del 27 de Febrero de 2010, en los principales medios de comunicación se mostró lo peor de la sociedad chilena. Se mostraron imágenes de conductas denominadas saqueos y pillaje, por parte sobretodo de la clase baja. Vecinos con escopetas y sables defendiendo su territorio como verdaderas fieras. Este terrible evento, sin embargo también sirvió como lección para tener un cambio en la conciencia, para valorar más lo que se tiene, haciendo hincapié en lo espiritual, lo cual no es efímero, pero se tomó de la peor manera posible. En la televisión se mostraron mínimos casos de ollas comunes organizadas por vecinos y para qué hablar de los casos en que la mercadería saqueada se repartía equitativamente, mientras que en la mayoría de lo que se nos mostró, la gente se dedicó a robar y no sólo cosas básicas para poder sobrevivir, sino que cosas superfluas que la misma televisión y los medios masivos de comunicación nos hacen darle cierto grado de importancia, como el alcohol y los televisores, ya que se le da más estatus a una persona que tiene un televisor plasma que a una que no lo tiene, y le da un carácter de bacán a una persona que bebe alcohol.

Lo que vino después fue aun peor, todos esperando el actuar de las fuerzas militares y de las grandes empresas para poder restablecer el orden público que debió haber estado siempre basado en la solidaridad y el autocontrol. Gente que en los tiempos de la dictadura militar estaba totalmente en contra de los militares, hoy se podía ver aplaudiendo cuando éstos pasaban por las calles, cual superhéroe. La clase humilde del país quedó mal frente al mundo, pero Chile propiamente tal queda bien ya que se levanta soberbiamente luego de la catástrofe con los aportes de los privados y particulares en la Teletón.

El daño se podrá reparar, no cabe duda, será a largo plazo, pero se podrá. Los edificios mal construidos se volverán a construir, y las empresas que perdieron plasmas o que sus locales fueron incendiados, se volverán a levantar. Pero los medios no se preocupan de informar a la gente sobre cuál es el verdadero problema que hay, y que influye en todo, en cosas como los saqueos, o en cosas como construir edificios de manera rápida con tal de ganar más dinero, la educación. Después de todo, una casa limpia no es la que se barre más, sino la que no se ensucia.